\n
H\u00e9ctor C. Barn\u00e9s.-<\/strong><\/a>\u00a0La mayor\u00eda de Estados modernos, y con ellos, las diferentes opciones pol\u00edticas que concurren a las elecciones democr\u00e1ticas, suelen debatirse entre\u00a0dos valores<\/a>,\u00a0la libertad y la seguridad<\/strong>. La primera suele ser la opci\u00f3n progresista, m\u00e1s optimista respecto al ser humano; la segunda, la conservadora, a la que no le tiembla el pulso al sacrificar ciertos derechos si ello garantiza que sus ciudadanos pueden dormir tranquilos por la noche. Una tendencia agudizada despu\u00e9s del 11 de septiembre y el ‘boom’ global del miedo al terrorismo. Pero, seg\u00fan el fil\u00f3sofo y \u201cfuturista\u201d sueco\u00a0Nick Bostrom<\/strong>, pronto tendremos que elegir:\u00a0o vigilancia extrema, o destrucci\u00f3n total<\/strong>.<\/p>\n Es lo que sugiere el\u00a0transhumanista<\/a>\u00a0en un ‘working in progress’\u00a0publicado<\/a>\u00a0en su p\u00e1gina web y titulado \u201cla hip\u00f3tesis del Mundo Vulnerable\u201d (‘The Vulnerable World Hypothesis’). Para el sueco de la Universidad de Oxford, donde se encuentra al mando del\u00a0Instituto Futuro de la Humanidad<\/a>, es\u00a0casi un milagro\u00a0<\/strong>que hasta ahora todas las bolas que hayamos sacado del misterioso saco de la tecnolog\u00eda hayan sido blancas (bueno, y una gris, las bombas nucleares que estallaron en\u00a0Hiroshima y Nagasaki<\/a>). Lo m\u00e1s probable es que\u00a0no tengamos la misma suerte en el futuro<\/strong>, una probabilidad que aumenta cada d\u00eda.<\/p>\n Lea tambi\u00e9n:\u00a0La paradoja de sembrar el #petr\u00f3leo en el Siglo XXI, por Juan Carlos Araujo S.<\/a><\/strong><\/p><\/blockquote>\n La teor\u00eda defiende que toda civilizaci\u00f3n llega a un punto de desarrollo tecnol\u00f3gico en el que \u201ccon toda seguridad es destruida<\/strong>\u00a0salvo que se implementen pol\u00edticas preventivas o una gobernanza global sin precedentes\u201d. A\u00fan estamos muy lejos de alcanzar esta cohesi\u00f3n global, recuerda Bostrom, que se\u00f1ala que vivimos en una condici\u00f3n de \u201csemianarqu\u00eda por defecto<\/strong>\u201d. Esta est\u00e1 definida por tres rasgos: nuestra habilidad para implementar pol\u00edticas preventivas est\u00e1 reducida, la capacidad para llevar a cabo proyectos de gobernanza global tambi\u00e9n y los diferentes actores que pueden desestabilizar este precario equilibrio tienen diferentes motivaciones. Entonces, \u00bfqu\u00e9 hacemos?<\/p>\n Bostrom no zozobra, y a juzgar por la seguridad de sus palabras, da la impresi\u00f3n de que es poco consciente acerca de lo\u00a0pol\u00e9mica<\/strong>\u00a0que puede resultar su propuesta. Para el fil\u00f3sofo, no cabe duda de que la posibilidad de una cat\u00e1strofe es tan elevada que acabar\u00eda con todas \u201clas objeciones razonables\u201d que suelen ponerse a determinadas medidas: \u201cPor ejemplo, incluso aquellos que desconf\u00edan de la vigilancia del gobierno probablemente favorec\u00edan un gran incremento de ella si fuese necesaria para prevenir la posible destrucci\u00f3n de una regi\u00f3n\u201d. Otra posibilidad: \u201cAquellos que valoran vivir en un estado soberano pueden preferir razonablemente hacerlo\u00a0bajo un gobierno mundial<\/strong>\u00a0si la alternativa implicase algo tan terrible como un\u00a0holocausto nuclear<\/a>\u201d.<\/p>\n El trabajo deja poco espacio a otra alternativa ante esa devastaci\u00f3n, que Bostrom concreta de dos maneras: o\u00a0la muerte de alrededor del 15% de la poblaci\u00f3n mundial<\/strong>\u00a0o\u00a0una\u00a0<\/strong>contracci\u00f3n de m\u00e1s de un 50% del PIB<\/strong>\u00a0durante m\u00e1s de una d\u00e9cada. La soluci\u00f3n que propone, recogiendo el guante de\u00a0Michel Foucault<\/a>, es un \u201cpan\u00f3ptico hi tech\u201d, cuya descripci\u00f3n suena a narraci\u00f3n de\u00a0Philip K. Dick<\/a><\/strong>. El sueco nos invita a imaginar un mundo en el que todo el mundo porta una \u201cetiqueta de la libertad<\/strong>\u201d, una especie de pulsera que registrar\u00eda audios y v\u00eddeos, los subir\u00eda en tiempo real a la nube y ser\u00edan interpretado por un algoritmo. \u201cSi se detecta actividad sospechosa, la informaci\u00f3n se derivar\u00eda a una de las\u00a0estaciones de monitorizaci\u00f3n patri\u00f3tica<\/strong>\u201d, explica Bostrom. El \u201cagente de la libertad\u201d podr\u00eda, entonces, revisar lo ocurrido y tomar una decisi\u00f3n.<\/p>\n Por supuesto, habr\u00eda grandes dificultades para implantar este sistema. El autor de ‘Superinteligencia: caminos, peligros, estrategias<\/a>‘ comienza por las tecnol\u00f3gicas. Basta con que el coste por individuo llegue a los\u00a0140 d\u00f3lares americanos (unos 122 euros)<\/strong>\u00a0para que \u201cla poblaci\u00f3n mundial entera pueda ser monitorizada continuamente a un coste de menos de un 1% del PIB global\u201d. Si es as\u00ed, se podr\u00eda ahorrar una gran cantidad de dinero en juicios, prisiones y otros sistemas de seguridad actuales. Tambi\u00e9n es posible que surjan resistencias ante ciertas medidas, como la \u201cencarcelaci\u00f3n preventiva\u201d, que Bostrom propone en caso de que los indicadores apunten un margen de duda inferior a un 1% de que un individuo se dispone a cometer un crimen.<\/p>\n Lea tambi\u00e9n: El fin de la era petrolera puede venir en autom\u00f3vil, por Juan Carlos Araujo S<\/a>.\u00a0<\/strong><\/p>\n<\/blockquote>\n Para entender el radicalismo de dichas decisiones hace falta comprender un poco mejor a qu\u00e9 clase de amenazas nos enfrentamos. Bostrom las clasifica en\u00a0cuatro grupos<\/strong>:<\/p>\n En este tipo de amenaza, individuos o peque\u00f1os grupos tienen una gran facilidad para ocasionar una gran destrucci\u00f3n. Pongamos, sugiere el fil\u00f3sofo, que alguien pudiese construir un arma termonuclear port\u00e1til en su cocina o que un peque\u00f1o grupo de cinco qu\u00edmicos desarrollasen un\u00a0arma biol\u00f3gica<\/a>\u00a0que tuviese el potencial de eliminar a miles de millones de personas. Aunque por lo general se trata de amenazas con un potencial limitado, no podemos pasar por alto la posibilidad de que miles de individuos causen\u00a0<\/strong>individualmente\u00a0<\/strong>una destrucci\u00f3n a peque\u00f1a escala<\/strong>\u00a0pero grande en caso de sincronizar esfuerzos. En este caso en el que el pan\u00f3ptico hi-tech se hace necesario, seg\u00fan Bostrom.<\/p>\n La\u00a0destrucci\u00f3n mutua asegurada<\/a>\u00a0es una doctrina militar seg\u00fan la cual, si un pa\u00eds con capacidad nuclear ataca a otro, la posibilidad de respuesta provocar\u00e1 la destrucci\u00f3n de ambas. Durante mucho tiempo, fue el garante de que el bloque sovi\u00e9tico y el capitalista no se aniquilasen. Existe el riesgo, recuerda Bostrom, de que ese equilibrio se venga abajo y surja la posibilidad de que el bando m\u00e1s agresivo pueda\u00a0dar el primer paso a la hora de destruir al otro<\/strong>porque el riesgo ser\u00eda casi inexistente.<\/p>\n Pongamos que la destrucci\u00f3n est\u00e1 causada por determinados actores que se sienten incentivados a tomar decisiones negativas para el resto pero beneficiosas para ellos, y que por acumulaci\u00f3n ocasionan\u00a0una destrucci\u00f3n mucho mayor\u00a0<\/strong>de la que podr\u00edan haber llevado a cabo de forma individual. Es lo que ocurre en este caso, que Bostrom ilustra con el\u00a0cambio clim\u00e1tico<\/a>: \u201cNo ser\u00eda un problema si solo una peque\u00f1a parte de los actores que pueden conducir coches o cortar \u00e1rboles lo hicieran, el problema es que demasiados se decantan por hacerlo\u201d. Sin coordinaci\u00f3n global, es imposible hacer frente a este tipo de amenazas.<\/p>\n Toda innovaci\u00f3n tecnol\u00f3gica implica consecuencias que apenas se pueden prever, riesgos que nadie pod\u00eda haber anticipado. Es lo que pudo ocurrir cuando\u00a0Edward Teller<\/strong>, uno de los cient\u00edficos del\u00a0proyecto Manhattan<\/a>, advirti\u00f3 que quiz\u00e1 una explosi\u00f3n nuclear podr\u00eda elevar la temperatura de la tierra a niveles nunca vistos. Finalmente no fue as\u00ed, pero el h\u00fangaro ya suger\u00eda\u00a0la amenaza de los \u00e1ngulos muertos de la ciencia<\/strong>. Se trata, resume el fil\u00f3sofo, de una cuesti\u00f3n de mala suerte, y no de mala fe ni de errores de coordinaci\u00f3n.<\/p>\n No todo pasa por poner a cada uno de los 7,5 mil millones del planeta una pulsera que registre todos sus datos. Bostrom tambi\u00e9n sugiere otras estrategias como intentar ralentizar el inexorable avance del desarrollo cient\u00edfico en aquellos campos que implican un mayor riesgo. Aunque tarde o temprano terminen surgiendo \u201cmalas tecnolog\u00edas\u201d, el tiempo que podamos ganar puede ser de oro. Es uno de los factores que obsesionan al sueco, que asegura que\u00a0si no hacemos algo ya<\/strong>\u00a0es probable que sea demasiado tarde.<\/p>\n Lea tambi\u00e9n: 10 desaf\u00edos para la #educaci\u00f3n, por Leopoldo Mart\u00edne<\/a>z<\/strong><\/p>\n<\/blockquote>\n Otra alternativa es la modificaci\u00f3n de preferencias o, en rom\u00e1n paladino, conseguir que todos los actores que puedan poner en riesgo la estabilidad global tengan incentivos para remar en la misma direcci\u00f3n. Ente el resto de medidas se encuentran la prevenci\u00f3n de que la informaci\u00f3n da\u00f1ina se propague, restringir el acceso a determinados materiales, instrumentos e infraestructura o un mayor c\u00e1lculo de riesgos. En definitiva,\u00a0estrategias de control de la poblaci\u00f3n\u00a0<\/strong>y los gobiernos<\/strong>\u00a0que pueden llegar a incluir la\u00a0censura<\/a>, que el trabajo califica como de \u201cparche temporal\u201d. Ello tambi\u00e9n incluye la autocensura por parte de cient\u00edficos.<\/p>\n Un reto presente y futuro es la dificultad de coordinar esfuerzos en una gobernanza global. La cooperaci\u00f3n entre Estados con objetivos similares e incentivos para actuar de manera coordinada es esencial para implementar estos sistemas de seguridad que, a la fuerza, han de ser globales. En especial, y a un nivel macro, a la hora de evitar que uno de los actores estatales sea el primero en pulsar el bot\u00f3n rojo en un entorno de conflictividad global. En resumidas cuentas, \u201cla vigilancia comprehensiva y la gobernanza global por lo tanto ofrecer\u00edan protecci\u00f3n contra un amplio espectro de potenciales vulnerabilidades para la civilizaci\u00f3n\u201d. Puede haber efectos negativos, concede el sueco, como\u00a0el refuerzo de los reg\u00edmenes autoritarios<\/strong>\u00a0o\u00a0el ascenso de una ideolog\u00eda hegem\u00f3nica<\/strong>, pero seg\u00fan Bostrom, son riesgos que merece la pena correr en comparaci\u00f3n con lo que puede pasar si no se adoptan. No resulta particularmente tranquilizador.<\/p>\n \n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" El director del Instituto Futuro de la Humanidad est\u00e1 trabajando en un estudio en el que se\u00f1ala las posiblidades que tenemos: o ceder parte de nuestros derechos o desaparecer. H\u00e9ctor C. Barn\u00e9s.-\u00a0La mayor\u00eda de Estados modernos, y con ellos, las diferentes opciones pol\u00edticas que concurren a las elecciones democr\u00e1ticas, suelen debatirse entre\u00a0dos valores,\u00a0la libertad y la seguridad. La primera suele ser la opci\u00f3n progresista, m\u00e1s optimista respecto al ser humano; la segunda, la conservadora, a la que no le tiembla el pulso al sacrificar ciertos derechos si ello garantiza que sus ciudadanos pueden dormir tranquilos por la noche. Una tendencia agudizada despu\u00e9s del 11 de septiembre y el ‘boom’ global del miedo al terrorismo. Pero, seg\u00fan el fil\u00f3sofo y \u201cfuturista\u201d sueco\u00a0Nick Bostrom, pronto tendremos que elegir:\u00a0o vigilancia extrema, o destrucci\u00f3n total. Es lo que sugiere el\u00a0transhumanista\u00a0en un ‘working in progress’\u00a0publicado\u00a0en su p\u00e1gina web y titulado \u201cla hip\u00f3tesis del Mundo Vulnerable\u201d…<\/p>\n![\"\"](\"http:\/\/casauslarpietri.org\/wp-content\/uploads\/2019\/07\/Futuro-Oxford-001.jpg\")
<\/p>\nEl pan\u00f3ptico ‘hi tech’<\/h2>\n
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Tipo 1 o \u201cdestrucci\u00f3n nuclear sencilla\u201d<\/strong><\/h3>\n
Tipo 2a o \u201cprimer ataque asegurado\u201d<\/strong><\/h3>\n
![\"\"](\"http:\/\/casauslarpietri.org\/wp-content\/uploads\/2019\/07\/Futuro-Oxford-002.jpg\")
<\/p>\nTipo 2b o \u201cpeor calentamiento global\u201d<\/strong><\/h3>\n
Tipo 0 o \u201csorprendente materia extra\u00f1a\u201d<\/strong><\/h3>\n
Y ahora, \u00bfqu\u00e9?<\/h2>\n
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