¿Cómo Despolarizarnos?, por José Antonio Gil Yepes
José Antonio Gil Yepes.- La polarización es una enfermedad socio-psicológica cuyo efectoes la exclusión entre las partes, de lo que podría ser un grupo armónico, en dos facciones que desconfían y se agreden. Venezuela es pobre por polarizada, no por falta de recursos. Tan polarizadores han sido nuestros gobiernos excluyentes como los opositores que han jugado a excluirlos – y lo han logrado. La proyección a largo plazo de tal enfermedad es el fracaso del cuerpo social, deslizándose hacia la anarquía o descomposición en grupúsculos que van haciéndose fuertes en sus respectivos espacios a como dé lugar: Un país fallido o que deja de serlo. Las causasde esta enfermedad son psico-sociales: las determinan el tipo de personas que somos. La polarización es un arma de quienes pretenden tener más poder que los demás. La motivación al poder está asociada a la anómia, síndrome cercano a la anarquía, pues consiste en el desacoplamiento…
Política y perdón. La clave de la salida…, por Orlando Viera Blanco
Orlando Viera Blanco.- La carga de violencia y desprecio intrínseco que caracteriza a la sociedad venezolana nace de reyertas sangrientas, devastadoras y maleantes (siglo XIX) Maurice Duverger decía que la política “es la lucha de los individuos para conquistar el poder donde los vencedores lo usarían en su provecho”. Pero es la política en términos de combate, no de estrategias y valores funcionales. En la política de los modernos el reto es conectar con las masas, dando con los elementos identitarios de preferencia y movilización. Y ese elemento es ser como tú. Veamos… Gramsci concebía la Política en su formación lógica: cuerpo-desarrollo por el poder. A Maquiavelo le gustaba la fuerza –comentaba- pero a Bodin el consenso. Entonces la política no es el fin justificando los medios (El Príncipe), sino la inteligencia que justifica ese fin [el poder]. De los antiguos a la modernidad la dimensión política pasó de la guerra a la…
La calle lo tiene loco, por Alexis Aponte
Alexis Aponte.– Dejaremos a un lado los temas económicos porque ante todo lo que acontece en el país, ésta pasa a un segundo plano. Semana de reflexión y oración en especial para todos los cristianos, apostólicos y romanos. Semana para rogarle a nuestro Dios por Venezuela. Qué ilumine a sus dirigentes para que todas las decisiones sean acertadas. Qué ilumine a todos los que están en el gobierno (lamentablemente hoy día embriagados de poder) y les haga sentir un halo de sensatez en estos aciagos momentos que vive la República. La semana que acaba de terminar estuvo colmada de gente en la calle. Protesta y expresión de un deseo de Libertad, Democracia y de decidir sobre nuestro futuro. La gente está cansada de colas por la comida, de la escasez y de la inseguridad personal. La gente tiene rabia represada y está perdiendo el miedo. Hombres y mujeres, ancianos, personas…